La certificación energética de edificios supone un paso adelante en Baleares en los objetivos de sostenibilidad. La construcción eficiente contribuye al desarrollo sostenible en Baleares y además supone una nueva forma de fomento del empleo. De un certificado energético se deducen las posibilidades de mejora de la eficiencia de una edificación, teniendo Baleares un potencial de mejora energético muy elevado. Dentro del global del consumo energético en Baleares, la parte que corresponde a edificación, viviendas, locales edificios terciarios, etc. supone un 40%. La Certificación energética de edificios pretende cuantificar ese porcentaje, ordenarlo y priorizar aquellas medidas de mejora de la eficiencia energética, que en una vivienda o local pueden suponer mayores ahorros. Baleares se suma así al resto de comunidades de España en el reto europeo de desarrollo sostenible. La certificación energética de edificios juega un papel fundamental, ya que afecta directamente a los grandes consumidores, como son la edificación en su conjunto y el sector residencial en particular, sector que en Baleares ha experimentado un elevado crecimiento. La eficiencia energética en Baleares, se traslada de un concepto más o menos abstracto, en manos de la administración local, hasta al ciudadano medio, que ve como por normativa, debe realizar el certificado energético de su vivienda. Es verdad que dicho certificado afecta a los edificios en Baleares que se encuentren a la venta o alquiler, exigiéndose que se muestre en los contratos de compra-venta. Un ciudadano de Baleares que desee adquirir una vivienda, podrá solicitar el correspondiente certificado de eficiencia energética.